miércoles, abril 24, 2024
Lo mejor que puedo decir de las elecciones vascas: nada
martes, abril 23, 2024
El Día (Tenerife): La Ciudad de México desdibuja los contornos de Madrid
domingo, abril 21, 2024
Nosotros a Tenerife, él a Uganda, vía Bruselas-Burundi. Elecciones vascas
El mismo vodevil antes que después de las elecciones, seguro que cabrían análisis meta políticos, pero a mí no se me ocurren. La gran virtud de la política, como del fútbol, es permitir a cualquiera tener una opinión muy formada y de mucha enjundia
sábado, abril 20, 2024
¿Y si mudarnos a Ciudad de México? A Roma sur
jueves, abril 18, 2024
En Washington sin tener nada que hacer; ni turismo; haber vuelto de México
Les he homenajeado brevemente en mi fuero interno como a los que viajan hasta aqui a resolver grandes crucigramas y los ávidos turísticos inyectados sus ojos de sangre por la cultura y los museos..
La extrema laxitud, ni siquiera un pequeño plan de visitas turísticas ni la impronta neurótica de abarcar la ciudad y confiar en diminutas vivencias como ver algo pintoresco o mantener un artisbo de comunicación muy impropia que por eso divierta.
Así las cosas espero llegar a casa para seguri devorando la Historia Mínima de México y empezar Los empeños de una casa de Sor Juana Inés de la cruz
Tan perturbado por la Ciudad de México y bien sorprendido por mi artículo Elecciones vascas: monoteísmo y comunión papal que necesito escribir un libro sobre la hinchada del equipo de mi ciudad, de una profundidad antropológica tan brutal y esencial como ignorada por todos. Los insólitos e impensables flujos y reflujos de la vida. Cuando lo más propio suele ser el cultivo intensivo y religioso de un mismo jardín. removiendo, eso sí, cada cierto tiempo la tierra.
miércoles, abril 17, 2024
De regreso a Washington, Ciudad de México, los espacios entrecruzados
Saliendo del Soumaya, en un Downtown de construcciones soberbias, que hace de Madrid y sus 4 torres de Chamartín un poblachón manchego
martes, abril 16, 2024
El Día (de Tenerife): Elecciones vascas y Athletic de Bilbao: monoteísmo y comunión papal
Euskadi celebrará elecciones al poco del triunfo del Athletic de Bilbao en la Copa del Rey, con la apoteosis de masas encandiladas, nunca vistas, y la plena satisfacción general. La gran puja bilbaína gracias al Athletic siempre ha sido granjearse la admiración mundial o, al menos, española. En ese afán, en términos estrictamente futbolísticos y resultados, batallan todo el mundo. En ser de la misma región los futbolistas, ninguno. Aunque el Athletic sea casi un equipo navarro. Por tanto, que se milite bajo una condición sin competencia, no sirve si en más de 40 años, no se ha ganado nada. Por eso el trofeo perseguido ha de ser uno secundario, que prime la suerte, la contingencia, la posibilidad. De hecho, en el ranking, el mejor equipo vasco es la Real Sociedad, por la participación en competiciones continentales.
La movilización de masas, su fervor, en perfecta y arrebatada comunión y en algún caso éxtasis, no tiene mejor parangón y antecedente que las vibrantes concentraciones religiosas en general: marianas o chiitas. Lo del Athletic no es lo de la Cibeles: una gran celebración, pero sin el gran espíritu del “pueblo” que festejar, sin ritos espectaculares que cumplir. Sin Virgen de Begoña que ofrendar la Copa.
Sin duda el mérito del Athletic es su distingo del mundo como únicos, especiales y distintos. Algo que hemos heredado fundamentalmente de Sabino Arana. La reducción futbolística sería insuficiente para un fenómeno de masas de tal calibre. No podemos disociar de este fenómeno tan ardiente y embriagador las próximas elecciones vascas, en las que parece van a ganar los herederos del nacionalismo cruento y montaraz. La geografía carlista impositiva.
Se van a dar dos grandes fenómenos de aglutinación y unidad, integración y monolitismo. El otro y relacionado, es el auge total de los partidos nacionalistas, con el sanchismo perfectamente de insumo sumiso de ellos, sin molestarse en dar batalla o gesto de diferenciación. No tan figuradamente se podría hablar de monoteísmo nacionalista. Habida cuenta de que para los grandes teóricos internacionales y referentes mundiales el nacionalismo es una religión de sustitución. Desde que Sabino Arana inventara el nacionalismo, nunca hubo en el País vasco esa homogeneidad tan compacta y dominante, sino diversidad y pluralismo, ahora erradicados en este trance monoteísta sin precedentes. La verdadera memoria era la del carlismo en Euskadi, Navarra y Cataluña, el culto a la Patria y la evangelización fuerte de la lengua. Tanto fervor que abarque a toda la sociedad en comunión compartida, es envidiada por aquellos que les seduce el escalofrío de los absolutos. Como se ha visto con la gabarra de Hollywood. ¿Qué fútbol…?
domingo, abril 14, 2024
Al sur de la ciudad de México, la UNAM y Sor Juana Inés de la Cruz
Entramos en la UNAM, aunque no soy nada academicista, me nutro de algunos de ellos, que tiene la información- conocimiento. El pensamiento es otro cantar. Berkeley tenía mucho más aura para mi, pero la UNAM también, que supongo es por Octavio Paz.
La casa de Diego Rivera tiene un único interés para mí, lo acogedora que puede ser la vida en una ciudad tan templada y umbría, que favorece y modela los espacios y vida interior. Hay una foto de él en la casa de Frida, en la que más depravado e infame no puede aparecr
sábado, abril 13, 2024
Con todo el patrimonio español se quedó México, lo reconozcan, carajo
Estos son los vascongados y españoles con los que me identifico plenamente, los tan tardíamente descubiertos
La ciudad de México es un lugar donde se podría vivir con gusto, y elegido para hacerlo por Roberto Bolaños, García Marquez, Álvaro Mutis, Miguel Bosé; increiblememte verde, espaciosa, con colonias y barrios de coquetos, recoletos, que favorecen la intimidad, que no parecen urbanos, por su silencio perturbado por el trino de los pájaros; mezcla de estilos arquitectónicos, Bauhaus, romanticismo, interesantes eclecticismos, el inevitablee barroco de las inglesias del barroco hispanoamericano.
jueves, abril 11, 2024
Washington familiar y pedestre, herido por mi conexión con la gabarra bilbaina
No se puede vivir en un estado de laxitud y distensión, de relajamiento y paz interior (y pax americana) permanente, sin que nada del mundo exterior perturbe y aflija. Resultaría inmoderadamente inhumano y aparece la gabarra que llevará al euipo vasco por la ría, como fenómeno astral.